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Tratamientos dermatológicos en el paciente millennial

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El Dr. José Luis López Estebaranz es director de la Clínica DermoMedic y profesor de Dermatología de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC):

El paciente millennial está muy informado, utiliza mucho las redes sociales y conoce muchos tratamientos médicos y estéticos, pero es necesario que el profesional le oriente porque en Internet “no es oro todo lo que reluce” y no es siempre fácil encontrar una información científica rigurosa. Atendemos muchos pacientes de entre 20 y 35 años, tanto por patologías de la piel frecuentes como el acné, rosácea, infecciones cutáneas… como por otro tipo de condiciones para mejorar la salud de la piel o para tratamientos médico-estéticos.

Tratamientos contra el Acné

Tenemos con mucha frecuencia el acné, tanto del adolescente como del adulto, en personas de más de 20-26 años. El acné del adulto es más frecuente en las mujeres de mediana edad y requiere un abordaje integral y holístico. Los pacientes que lo padecen nos demandan unos resultados rápidos y eficaces. Para ello, tendremos distintas opciones terapéuticas dependiendo de la intensidad y el grado de las lesiones a tratar: desde tratamientos tópicos combinados; pasando por el uso de antibióticos y antiinflamatorios sistémicos en combinación con tratamientos tópicos; el uso de isotretinoína, que es el tratamiento más eficaz para su eliminación y que requiere un control analítico junto con un seguimiento adecuado.

Ahora disponemos además de terapias con luz fluorescente (terapia biofotónica), que previenen y mejoran la aparición de cicatrices además de eliminar las lesiones activas del acné.

Otras patologías que nos podemos encontrar en pacientes jóvenes son, a veces, ciertas Clínica Derinfecciones víricas que pueden ser verrugas o papilomas y que hay que tratar de forma adecuada con queratolíticos, crioterapia o con sistemas láser de CO2.

Rosácea

El acné rosácea es una patología muy frecuente en mujeres, tanto en jóvenes como en edades más maduras. Requiere un manejo médico específico. Es importante evitar los factores desencadenantes como pueden ser el uso de ciertos cosméticos, radiaciones ultravioleta o el estrés. Tenemos tratamientos muy efectivos que combinan antiinflamatorios (metronidazol, ivermectina oral y tópica, además de la isotretinoína a dosis bajas). También aquí, el uso de sistemas de luz fluorescente ha supuesto un avance, porque nos permite eliminar rápidamente el picor y las molestias que ocasiona esta patología de forma eficaz y sin efectos adversos.

Melasma

Los pacientes nos demandan muchas veces la eliminación de manchas faciales y de hiperpigmentaciones: el melasma, que es más frecuente en las mujeres a partir de la adolescencia y la pubertad por influencia de la radiación ultravioleta y también por cambios hormonales o por el uso de anticonceptivos.

Hoy día tenemos tratamientos muy efectivos con peelings despigmentantes específicos, con fórmulas magistrales que combinan distintos despigmentantes derivados del ácido retinoico, hidroquinona y antiinflamatorios. Además, la utilización del ácido tranexámico ha supuesto una revolución en el manejo, a medio y largo plazo del paciente con melasma.

También se puede utilizar el láser e IPL, pero con bajas intensidades y fluencias para conseguir resultados óptimos y evitar un efecto rebote. No es la primera opción en el manejo del melasma, pero puede ayudar en ciertos casos.

Tatuajes

Tienen una gran prevalencia en este rango de edades y nos encontramos con pacientes que los quieren eliminar o cambiar. A las personas que se quieran hacer un tatuaje les aconsejamos que lo piensen dos veces y, si deciden hacerlo, que lo realicen en un centro acreditado y profesional que les pueda garantizar las condiciones sanitarias necesarias para evitar riesgos de infecciones, cicatrices, reacciones alérgicas a algunos de los componentes que pueden tener las tintas utilizadas.

Para eliminar los tatuajes disponemos de sistemas muy específicos de láseres de nanosegundos y picosegundos que logran su eliminación sin marcas ni cicatrices. A veces, en algunos resistentes donde se han hecho solapando varios tatuajes o en los que existen cicatrices o fibrosis, podemos combinar láseres fraccionados junto con el de Q-switched. Todos estos dispositivos deben ser utilizados por médicos especialistas expresamente entrenados en su uso.

Cicatrices

Las cicatrices pueden ser secundarias a procesos infecciosos o inflamatorios como el acné, procedimientos quirúrgicos, secundarias a un accidente, quemadura o a un procedimiento abrasivo. En general, cuanto antes se traten, mejores serán los resultados que obtendremos desde el punto de vista estético. En la actualidad disponemos de láseres fraccionados, tanto ablativos como no ablativos, para su tratamiento inmediato. Los vamos a utilizar después de quitar los puntos tras extirpaciones programadas o de forma precoz en otras cicatrices. Así obtendremos los mejores resultados.

Más difíciles de eliminar son las cicatrices del acné, que requieren un tratamiento más intenso y a veces, la combinación de distintos procedimientos. Usamos los sistemas de radiofrecuencia con microagujas, que es un sistema novedoso, menos agresivo y que permite el remodelado en más profundidad del colágeno, evitando las depresiones que pueden dejar.

Uñas y pestañas permanentes

Sobre las uñas permanentes y semipermanentes tanto la Agencia Española del Medicamento (AEMPS), la Dirección General de Cosmetovigilancia y Farmacovigilancia, como la Academia Española de Dermatología (AEDV), han alertado a la Comisión Europea de la necesidad de regular el uso de estos productos por centros especializados y acreditados, siguiendo la normativa de salud laboral adecuada. Los dermatólogos estamos viendo un aumento en nuestras consultas de pacientes con reacciones alérgicas, tanto en las personas que usan estas uñas y pestañas como en los trabajadores que las manipulan y las ponen. Son los acrilatos y sustancias derivadas las responsables de estas sensibilizaciones. En el proceso de aplicar uñas semipermanentes o en otros procedimientos de “body art”, se manipulan una serie de productos químicos que son alergénicos y que pueden producir eccemas de contacto o dermatitis allá donde se aplican, o al entrar en contacto con los párpados y otras zonas faciales. Se puede decir que los acrilatos están considerados uno de los “top” de los alérgenos, ya que en la actualidad, son uno de los productos que más reacciones alérgicas están produciendo en Estados Unidos y en Europa en los últimos años. Son muy seguros cuando están estables, pero en el proceso de manipulación con otros productos químicos que se mezclan y solidifican, es donde se produce el riesgo de sensibilización. En los centros estéticos que los manejan se deben utilizar unas medidas de protección adecuadas, porque incluso los guantes usados normalmente no aíslan lo suficiente y hay que cambiarlos de forma constante. Las personas que se sensibilizan lo hacen ya para toda su vida y el problema es que estos acrilatos se utilizan en productos como las prótesis traumatológicas o los empastes dentales, y si alguien está ya sensibilizado podrá tener problemas en el futuro si precisa estos productos médicos o sanitarios.