Según la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), la demanda de tratamientos estéticos durante Navidad aumenta entre un 15 y un 20%. Factores como la mayor disponibilidad de tiempo y el frío hacen que muchas personas aprovechen estas fechas para someterse a algún tratamiento.
A pesar de que las operaciones quirúrgicas crecen, según el cirujano plástico, Pierre Nicolau, “los tratamientos más demandados son los poco invasivos. Las inyecciones de toxina botulínica, los productos de relleno, los peelings superficiales y los hilos tensores son algunos de ellos, ya que los resultados son rápidos, dejan pocas señales visibles y sus efectos desaparecen en cuestión de horas. En el caso de las intervenciones quirúrgicas, hay algunas que son poco invasivas y permiten una recuperación rápida, como la cirugía de párpados o el lifting facial, que ya no tiene nada que ver con los liftings que se realizaban antiguamente”.
Las personas que se someten a este tipo de tratamientos comprenden un abanico de edad muy amplio. En el caso de las personas entre 18 y 35 años, buscan un embellecimiento de su rostro o cuerpo, mientras que las personas con una edad comprendida entre los 40 y los 65 años desean borrar los signos de la edad y recuperar el volumen perdido en la piel.
También, dice el doctor, “es de vital importancia seleccionar cuidadosamente la clínica y el equipo médico al que se acude y es necesario que el médico conozca a la perfección los tratamientos que se van a realizar, ya que es muy importante que los productos sean utilizados con el fin de garantizar los mejores resultados minimizando los posibles riesgos. La importancia de personalizar los tratamientos y adaptarlos a la necesidad de cada paciente puede influir en el resultado final del tratamiento y en la salud de los pacientes”.