Los datos de una encuesta realizada por la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) a cirujanos plásticos de toda España, indican que estos reciben en torno al 60% de la demanda de intervenciones estéticas en primavera, repartiéndose las otras tres estaciones del año -verano, otoño e invierno- el 40% restante en porcentajes similares.
Aumento mamario. Esta es la intervención más solicitada, cuyo postoperatorio suele durar una media de tres semanas, aunque puede variar y dilatarse en el tiempo dependiendo de la zona en la que se sitúe la prótesis mamaria. Además, durante la primera semana o 10 días, las pacientes deben evitar levantar peso, alzar mucho los brazos o efectuar movimientos bruscos que puedan provocar complicaciones.
Liposucción. Frente al exceso de grasa resistente a dietas y ejercicio, en esta época del año, es la segunda intervención más demandada, sobre todo en el área abdominal y cartucheras. Tras su realización y durante el primer mes, los pacientes deben evitar tomar el sol y llevar una faja compresiva para disminuir la inflamación de la zona intervenida.
Intervenciones faciales: rinoplastia. Las intervenciones faciales son las terceras más demandadas en primavera. Las cirugías de la nariz requieren de un postoperatorio en torno a un mes. La férula de protección se suele retirar a los siete días aproximadamente, pero luego hay que seguir protegiendo la zona intervenida de posibles golpes y el sol.
Blefaroplastia. En el postoperatorio de esta intervención es aconsejable mantener la cabeza elevada unos días y usar compresas frías para reducir posibles hematomas e inflamación. Además, durante las primeras semanas, puede presentarse cierto lagrimeo e hipersensibilidad a la luz y deberían evitarse actividades fuertes y dejar de usar lentillas, en caso de precisar de ellas, para sustituirlas temporalmente por gafas.
Tratamientos de rejuvenecimiento facial no quirúrgico. Al ser mínimamente invasivos, no requieren apenas de postoperatorio. No obstante, los más habituales, los rellenos con ácido hialurónico y la aplicación de toxina botulínica, pueden dar lugar a cierta inflamación hasta unos siete días después. Se recomienda, además, no tomar el sol y evitar las temperaturas elevadas unas semanas después de las intervenciones.