Quemarse la piel para mejorar nuestro aspecto, esta es una nueva moda entre los jóvenes salida de TikTok y una vez más, las redes sociales se han convertido en creadoras de modas que pueden poner en riesgo la salud. La última es practicar el “contouring” facial con crema solar. Las personas se aplican crema solar en determinadas zonas de la cara para que solo se bronceen algunas y quemarse la piel de otras, y, según dicen, crear un aspecto “buena cara”, como se suele hacer con el maquillaje.
“Es un grave peligro para la salud de la piel, ya que las zonas donde no se aplica el protector solar se queman para conseguir el “efecto maquillaje” deseado. Además, es una moda extendida entre la población más joven, que precisamente son los menos conscientes de que las quemaduras solares son un gran factor de riesgo de aparición de cánceres de piel a largo plazo, incluso décadas después de que se hayan producido estas quemaduras” remarca el Dr. Miguel Sánchez Viera, director del Instituto de Dermatología Integral.
Utilizar crema solar no evita el bronceado
Muchas personas tienen todavía el concepto de que usar cremas fotoprotectoras evita el bronceado, cuando no es así, incluso si se utiliza un factor de protección muy alto, como puede ser el 50. La función de las cremas solares es aumentar el tiempo que una persona puede estar bajo el sol sin quemarse. Es decir, una crema solar de factor 30 multiplica por 30 los minutos que se puede estar bajo el sol protegido de su radiación. “Lógicamente, este tiempo se multiplica dependiendo del fototipo de la piel. Una persona con ojos, pelo, piel muy clara y que siempre se quema (Fototipo I) nunca debería exponerse al sol sin crema. Mientras que una persona con ojos, pelo, piel oscura y que se broncea rápido (fototipos a partir del IV) puede utilizar una crema fotoprotectora incluso del 50 y acabará bronceándose, aunque tarde más tiempo, pero de forma segura” aclara el doctor.
El problema del “contouring” realizado con crema solar es que hay zonas del rostro en las que no se utiliza fotoprotección, dejando desprotegida esa zona e incrementando el riesgo de cáncer de piel. “Quizá si las nuevas generaciones supieran que el sol tiene también un efecto de envejecimiento prematuro, no realizarían este tipo de prácticas tan peligrosas. Las redes sociales también deberían ser utilizadas para informar de cómo protegerse del sol y de sus riesgos: utilizar siempre fotoprotector, no tomar el sol en las horas centrales del día, utilizar prendas ligeras para cubrir las zonas expuestas y permanecer en lugares con sombra, especialmente si ha existido una quemadura solar previa” finaliza Sánchez Viera.