La edad aumenta el riesgo de muerte por melanoma, así se puso de manifiesto en un trabajo presentado en el I Congreso AEDV Virtual Otoño 2020. En los últimos años, han sido grandes los avances terapéuticos en el melanoma, gracias a la aparición de las terapias dirigidas y la inmunoterapia el panorama de los pacientes con peor pronóstico ha cambiado notablemente. Sin embargo, estos tratamientos van dirigidos a perfiles de pacientes muy concretos. “Queríamos saber qué ocurría en otro tipo de pacientes con melanoma, personas que presentan melanomas gruesos pero que no tienen metástasis. ¿Qué pasa en estos casos? ¿Tienen mejor pronóstico que los que presentan metástasis o en cambio su expectativa de vida se ve perjudicada por otros factores?”, argumenta el Dr. Aram Boada García, del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona).
Evolución del riesgo de muerte por melanoma
Un melanoma mayor de 4 milímetros suele tener peor pronóstico que otro con un tamaño menor. Hasta ahora, se tenía en cuenta además la biopsia del ganglio centinela para saber si el cáncer se había extendido, ya que esto empeora el pronóstico. “Sin embargo, en la clínica vemos pacientes que, a pesar de no tener metástasis, con un estadio IIB y IIC van peor que los que tienen un estadio III, para los que sí hay tratamientos adyuvantes”, reflexiona el Dr. Boada García.
Por este motivo, decidió llevar a cabo un estudio de este tipo de pacientes y conocer qué factores estaban influyendo en su pronóstico de vida. Para ello contó con la ayuda de otros dermatólogos, como el Dr. Antonio Tejera-Vaquerizo, del Servio de Dermatología del Instituto Dermatológico Globalderm, de Palma del Río (Córdoba), quien junto con otros especialistas de diferentes puntos del país analizaron las bases de datos de 5 centros con una población total de 362 pacientes con melanomas de un grosor superior a los 4 milímetros (gruesos) o mayores a los 6 milímetros (ultra gruesos), pero sin afectación en el ganglio centinela.
Tras analizar los datos de estos pacientes, se observó que tener una edad superior a los 70 años supone un aumento de la mortalidad por melanoma. “En personas de más edad, los melanomas se comportan de forma más agresiva, independientemente de otros factores. En los ancianos, sobre todo en varones, son más gruesos, están más ulcerados o tienen un crecimiento más rápido, pero de forma independiente a todos los hallazgos, la propia edad les empeora el resultado”, explica el Dr. Boada García.
También comprobaron que este tipo de melanomas, en personas menores de 55 años, tienen un pronóstico mejor.