Muchas personas que se han realizado un injerto capilar se preocupan por cuáles son las pautas a seguir tras esta intervención, como si es posible practicar deporte con asiduidad, cuándo se puede restablecer la actividad física o qué tipo de deporte o rutina son menos perjudiciales. Practicar deporte tras un injerto capilar es posible, siempre y cuando se sigan las recomendaciones adecuadas y se respeten los tiempos indicados tras la cirugía. De no hacerlo así, la viabilidad de los folículos injertados podría ser menor e, incluso, podríamos perder folículos en el momento del ejercicio, explica la Dra. Mª Eugenia Segovia, médico estético de la clínica Hospital Capilar.
Cabe recalcar que, el injerto capilar realizado con la técnica FUE, la más demandada en la actualidad, dice la experta, suele ser compatible incluso con la rutina de los deportistas de élite, al conllevar un tiempo menor de recuperación que podrán ajustar a periodos de descanso o a etapas vacacionales. De esta forma, tras la cirugía, la actividad física se recuperará gradualmente, pudiendo realizarse ejercicio de manera leve o moderada a partir de los quince días, aunque el tiempo variará en función del tipo de deporte que se practique y de dónde se lleve a cabo el mismo.
Según la intensidad del ejercicio
Cuando pasen los quince primeros días, el paciente podrá practicar ejercicios ligeros de baja intensidad, evitando siempre la excesiva sudoración, aunque si ésta se produjera, podremos secar la zona injertada cuidadosamente, sin llegar a frotar con una toalla de microfibra. Por esta razón, lo aconsejable durante este primer periodo será realizar acciones como pasear, meditar, estiramientos o recuperar parte de la rutina habitual del gimnasio, aumentando progresivamente la actividad hasta que transcurra un mes, momento a partir del cual podremos realizar deporte sin restricciones, destaca la doctora.
Tras transcurrir el primer mes desde la intervención, se podrá comenzar a realizar ejercicios aeróbicos, levantamiento de pesas o deportes que impliquen la utilización de casco o de gorro, dado que, en este periodo, la incisión se habrá cerrado y la raíz del folículo se habrá asentado, siendo más resistente a los roces o al sudor.
Factores a tener en cuenta
La sudoración, por su parte, será un factor clave a tener en cuenta antes del primer mes, ya que puede afectar al proceso de recuperación del trasplante capilar, produciendo descamación, enrojecimiento y picores y aumentando, por otro lado, el riesgo de infección de los poros del cuero cabelludo, lo que provocará que la cicatrización sea más lenta.
Asimismo, según la especialista, deportes acuáticos como la natación serán los últimos en poder reincorporar al hábito diario, debido a que, en este caso, el pelo se encuentra en contacto con los químicos que contiene el agua de las piscinas, como la humedad o el cloro, que pueden ser perjudiciales durante el primer mes para el cabello injertado. Además, este deporte precisa del uso de un gorro de látex o de silicona, materiales que pueden ser agresivos para los folículos; por lo que lo más recomendable será utilizar gorros de tela, que eviten la tracción de los mismos.
Por último, otro elemento a tener en cuenta será la exposición solar. Por ello, en los casos en los que se realiza deporte al aire libre, será preferible evitar la exposición directa al sol y no practicar actividad física durante las horas de mayor incidencia. En el caso de que se realice una actividad al aire libre, se aconseja proteger la cabeza con una gorra, sombrero o pañuelo, una vez que transcurra el tiempo recomendado para comenzar a usar estos complementos.