La ciencia y la tecnología en medicina estética acaba de dar un paso de gigante en su lucha por revertir el envejecimiento facial de forma no invasiva, segura y con resultados naturales y duraderos, restaurando el volumen, el tono y la tersura de la piel del rostro. Según el Dr. Ángel Martín, cirujano plástico y director médico de Clínica Menorca, con más de 30 años de experiencia en consulta de medicina estética, “en la práctica clínica diaria, el rejuvenecimiento facial debe ser un tratamiento global, en el que se deben analizar las características individuales de cada paciente, teniendo en cuenta las causas del envejecimiento, porque a cada persona le afecta de forma diferente, e incidiendo en la importancia de mantener unos niveles óptimos de colágeno y ácido hialurónico”.
Con el nuevo protocolo se consigue dibujar de nuevo el triángulo de la juventud atacando los tres puntos conflictivos en un solo tratamiento, reposicionando los volúmenes con un efecto lifting natural sin necesidad de cirugía, aportando hidratación y colágeno. La ciencia y la medicina estética se unen a la pericia de la mano del profesional.
Para realizar un tratamiento global del rostro hay que saber combinar los diferentes inyectables, estar familiarizado con sus concentraciones y sus propiedades. La prevención es la mejor arma contra el envejecimiento, los resultados de los tratamientos médico estéticos actuales eran impensables hace unos años, hoy en día responden a la demanda de los pacientes, son seguros y con resultados más naturales y duraderos si se lleva un estilo de vida saludable, que abarca una alimentación sana y equilibrada, evitar todo lo que se pueda el sedentarismo, realizar ejercicio físico de forma habitual y evitar el estrés, sumamente dañino para nuestra piel.
El protocolo combina las más innovadoras técnicas que son rápidas, sencillas y efectivas:
– Un evolucionado ácido hialurónico reticulado para voluminizar y recuperar los ángulos de la juventud.
– Un skinbooster de polidioxanona para recolagenizar el tejido.
– Y una novedosa formulación de ácido hialurónico no reticulado y ácido succínico que proviene del ámbar e interviene en el ciclo de Krebs, oxigena y bioestimula a nivel celular.
Tratamiento
Es un protocolo personalizado que combina los tres inyectables para prevenir o reparar la flacidez gravitacional. El procedimiento se realiza en una sola sesión, no lleva más de 30 minutos y el paciente puede incorporarse a su vida habitual.
Los resultados se aprecian de forma inmediata, pero cuando se notan verdaderamente es al mes de haberse realizado el tratamiento, que es cuando comienza la recolagenización y permanecen una media de 15 meses.
El ácido hialurónico reticulado ultrapuro permite una alta cohesividad e integración en los tejidos mejorando su capacidad de soporte. Estas características permiten desarrollar las técnicas BAP para remodelar las zonas malar y submalar. BAP son puntos bioestéticos en los que se maximiza la difusión del producto y donde no existen vasos sanguíneos ni ramificaciones nerviosas. En el rostro son 5: cigomático, nasal, trago, mentón y mandibular; y la técnica BAP específica para el cuello contempla 10 puntos de inyección.
Se inyecta a nivel subcutáneo. Gracias a sus características reológicas se puede remodelar en tan solo dos sesiones con un mes de intervalo entre ellas y los beneficios permanecen desde el año a los 15 meses.
Con el skinbooster y el ácido succínico se revierte y previene el envejecimiento de la piel. El primero se inyecta a nivel subdérmico para recolagenizar y combatir la flacidez, en todas las zonas de la cara para tratar arrugas de la frente, en la zona periocular para mejorar la apariencia de vista cansada y prevenir la pigmentación o en los pliegues nasolabiales y se obtienen muy buenos resultados para tensar el cuello. Cada vial contiene dos millones de microesferas de Polidioxanona y cubre la misma área que 1400 hilos monofilamento. Los resultados se aprecian a las 4 semanas, el volumen natural se ha restaurado gracias a la estimulación de colágeno, proporciona un efecto lifting natural.
Por su parte, el segundo se inyecta a nivel superficial, en 20 puntos en cara y cuello, como la mesoterapia, para mejorar su tono, elasticidad y firmeza. Es una formulación novedosa que combina el ácido succínico con ácido hialurónico no reticulado que previene el envejecimiento, protege la piel, evita la pigmentación y bioestimula a nivel celular, es antioxidante y antiinflamatorio. El ácido succínico interviene a nivel mitocondrial y en el proceso del ciclo de Krebs oxigenando y proporcionando energía a las células.