Inmaculada Canterla, directora de la clínica Cosmeceutical Center explica los puntos que hay que tener en cuenta antes de hacerse un tratamiento de Medicina Estética para conseguir los máximos beneficios y obtener los resultados esperados.
– Tener claro que a veces las mejoras que pueden ofrecer los tratamientos de medicina estética son parciales, y no totales.
– El éxito del tratamiento es la suma de dos factores: elegir el producto/tratamiento adecuado y ponerse en las manos de un buen profesional que utilice una buena técnica. El mismo producto en diferentes manos puede dar resultados muy distintos.
– La mejor fuente de información sobre el cuidado experto de la piel la ofrecerá siempre el profesional en Medicina Estética y no una amiga, una madre, un hermano,… No hay recetas estándares que sirvan para todo el mundo, la individualidad de los tratamientos es básico en la Medicina Estética.
– Nunca seleccionar un tratamiento por el precio. Es importante escoger una opción terapéutica por la idoneidad para cada caso y no por su coste.
– Confiar en la palabra del experto. Si en alguna ocasión, el especialista desaconseja algún tratamiento es con criterio y con honradez ¡hay que escucharlo!. Escuchar y dejarse asesorar es la base para obtener unos buenos resultados.
– Hay que considerar que el mejor de los tratamientos no agota por sí mismo todos los recursos, pudiendo ser necesarias otras actuaciones terapéuticas complementarias, repasos o retoques. Normalmente no existen tratamientos únicos “que todo lo solucionan”.
– Es básico conocer que cualquier tratamiento puede tener algún efecto secundario colateral. Desde un simple peeling, pasando por aparatología o infiltración…
– Cuando se trabaja con agujas pueden salir hematomas, aunque al cabo de unos días (variable según la persona) los hematomas se van.
– La realización de fotografías del antes y después son de gran ayuda, ya que permitirán una correcta evaluación diagnóstica, terapéutica y de los resultados.