El dermatólogo, Carlos Morales Raya, explica que este inductor de colágeno con policaprolactona es un inyectable indicado para arrugas, marcas y lesiones de acné de forma sorprendente, porque nada más inyectarse activa la fabricación de colágeno de tipo I.
Previene la aparición del envejecimiento y la flacidez, pero también los trata, permitiendo desacelerar el paso del tiempo. Puede empezar a utilizarse a partir de los 26 años (cuando se empieza a degradar el colágeno) para frenar el proceso de envejecimiento.
Casos de acné y cicatrices
A diferencia del ácido hialurónico, que rellena las depresiones de forma provisional, este inyectable al actuar desde el momento de aplicación, mejora marcas de acné, cicatrices o estrías.
Además, posee una alta redensificación de la piel, pero no se limita a engrosar, sino que aporta un extra de jugosidad y tersura, mejorando la calidad de la piel. En mi caso, prefiero poner menos cantidad de producto y adelantar las sesiones para hacer un mejor seguimiento de mis pacientes.
Resultados
El punto álgido se produce entre 2 y 3 meses después de la sesión y los resultados se mantienen, sin decrecimiento, como mínimo hasta 18 meses, llegando incluso a los 24 meses dependiendo de la presentación seleccionada. Esto permite unos resultados naturales y discretos, aunque impactantes siendo visible la mejoría desde los primeros días.
Se trata de un tratamiento prácticamente indoloro y no requiere reposo, que debe ser realizado por un profesional médico. Tras su aplicación, suele aparecer inflamación durante las siguientes 24-48 horas, pero esta desaparece con el tiempo.