Según explica el Dr. Luís López Tallaj, cirujano plástico, estético y reparador: “la melatonina es una poderosa molécula que producimos de manera natural hasta bien entrada la edad adulta y que, participa en los procesos de antiaging internos, lo que redunda en nuestra salud global. Nos cuida por dentro, lo que tiene, a su vez, un claro reflejo en nuestra imagen externa.
Cuando es producida por la glándula extrapineal, esta hormona aporta notables beneficios antioxidantes y antiinflamatorios, al participar en la modulación de la homeostasis mitocondrial (en la correcta transmisión de la energía a las células)”. Está presente, añade el cirujano estético experto en antienvejecimiento, en numerosos procesos orgánicos y “se sintetiza en órganos y sistemas como cerebro, retina, epitelio pulmonar, piel, tracto gastrointestinal, hígado, riñones, glándula adrenal, tiroides, páncreas, timo, bazo, sistema inmune, tracto reproductor y células endoteliales, entre otros”.
Obtención natural
El doctor explica que, “La melatonina se puede obtener de una forma sencilla, pero no tanto, teniendo en cuenta el actual estilo de vida y el estrés asociado. Se consigue con una correcta higiene del sueño y la clave es también sencilla. Hay que cuidar el entorno de descanso, pero, por encima de todo, procurar que esté oscuro. Existe una proteína que le da el color rojo a la sangre, y que se activa cuando nos vamos a dormir, siempre cuando exista el ambiente adecuado, basado en la oscuridad del lugar. Estas sustancias se llaman porfirinas. Se activan cuando hay un ambiente total de oscuridad y generan la producción de un neurotransmisor/hormona llamado melatonina que es la que va a la glándula pituitaria o pineal y le ordena que produzca hormona de crecimiento para que el sueño se convierta en un sueño reparador”.
Regulador del sueño
Entra en juego aquí la función por la que la melatonina es más conocida: la de regular nuestro sueño. “El problema es que con los años la producimos menos y dormimos peor, con lo que podemos entrar en un círculo vicioso. De ahí al insomnio hay apenas un paso y es que, la importancia del sueño en nuestra salud es radical.
Una mala calidad del sueño o la falta de este, aumenta el estrés, empeora nuestra salud mental, nuestro aspecto físico, por no hablar de los estudios recientes que investigan la asociación de enfermedades como el Alzehimer.
La solución pasa por suplementación con fines antiaging, que se debe iniciar desde el momento en que se comience el declive biológico, a mediados de la treintena, sobre todo en personas que llevan un estilo de vida tóxico y desordenado, en el que domina principalmente el estrés”.
Suplementación
“La pauta actual resulta, sin embargo, claramente insuficiente”, según el doctor López Tallaj, “para quien las presentaciones disponibles en el mercado, sobre todo en España no exceden los 3 mg de melatonina por comprimido, cuando lo ideal, asegura, para alcanzar lo que deseamos en cuanto al ciclo circadiano y la calidad de sueño es por lo menos 10 mg de melatonina media hora antes de ir a la cama. Además, no presenta efectos secundarios ni problemas asociados de adicción, como ocurre, en algunos casos, sobre todo si se toman sin control”.