Una limpieza facial profunda a tiempo es el ritual primordial para poder tener la piel en buen estado. Las Dras. Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto han creado dos nuevos protocolos que, además de limpiar en profundidad el rostro, aceleran el cambio cutáneo, dando como resultado una piel luminosa, calmada, rejuvenecida y sin acné.
Limpieza profunda e hidrodermoabrasión
Con un dispositivo de última generación, no invasivo, de limpieza profunda e hidrodermoabrasión, que se utilizará como una herramienta muy completa, bajo supervisión médica y usado por las especialistas en dermoestética, permitirá la infusión de sérums exfoliantes a la vez que produce una extracción de residuos de la piel por succión. Además, la penetración de principios activos es mayor mediante un mecanismo de electroporación, abriéndose canales que permiten la mayor eficacia de los activos en la piel da tensión. Mecanismos de contracción muscular y frío y calor, aplicados según indicación, conseguirá efectos reafirmantes, calmantes de la piel y estimulación para la producción de colágeno.
Recomendado
Su uso está indicado en diversos perfiles cutáneos como pueden ser pieles apagadas o cetrinas, secas-deshidratadas, grasas, con irregularidades o con el poro saturado. Está también muy indicado para lucir una piel sedosa y luminosa antes de un evento.
Con distintos protocolos de aplicación para conseguir diferentes objetivos, siempre personalizando cada paso en función de lo que cada piel requiere, puntualizan las expertas.
- Higiene plus: es un tratamiento muy completo en el que no solo se realiza una higiene profunda de la piel, sino que además se acelera el recambio cutáneo, y se aplican activos, obteniendo una piel luminosa, calmada y con el poro limpio y, por tanto, sin imperfecciones y de aspecto uniforme.
- Tratamiento ideal para lograr una renovación, hidratación y equilibrio de la piel al completo, que se traduce en una piel luminosa y se consigue a través de la hidrodermoabrasión y la infusión directa de sérums. Está indicado para tratamiento y prevención del acné, rejuvenecimiento y equilibrio dérmico en pieles secas, grasas, apagadas o como mantenimiento de unas buenas condiciones de la piel. Acompañado de masaje facial drenante y relajante. El efecto final es una piel jugosa, renovada, perfecto para poner a punto la piel de cara al cambio de estación o como preparación de la piel para eventos.
Las especialistas aclaran que en función de las necesidades de la piel se establecen una secuencia de mantenimiento quincenal o mensual, ya que los protocolos van siempre acompañados de un estudio de las condiciones de partida de la piel y un ajuste de la pauta cosmética domiciliaria acorde a las particularidades y necesidades de los pacientes, importante para mantener los resultados a largo plazo.
